Unas vacaciones relajantes en los manantiales naturales de la Toscana

La Toscana ofrece a sus visitantes casi de todo: arte y cultura, naturaleza, buena comida y también descanso y relax en las fuentes termales. Esta extraordinaria región cuenta con una amplia selección de aguas termales naturales y extraordinarios balnearios. Así que empiece a elegir el mejor alojamiento en la Tos cana - villas, hoteles, B&B o una casa de vacaciones - y prepárese para disfrutar

Toda la Toscana está salpicada de aguas termales de diversos tipos, que van desde los balnearios de lujo a las fuentes naturales, en la práctica habrá mucho donde elegir. Además las aguas termales no sólo son calientes, y por lo tanto decididamente agradables, acogedoras y relajantes, sino que también tienen propiedades curativas, ya conocidas por los romanos.

Entre las fuentes termales de la Toscana, Bagni San Filippo, en la provincia de Siena, es una de las más antiguas, ya conocida desde la Edad Media, donde las aguas termales están rodeadas de vegetación y naturaleza, y abundan los lodos naturales para una piel sedosa. También las termas de Petriolo están rodeadas de naturaleza. El agua fluye a 43 ° C en piscinas naturales donde podrá sumergirse en absoluta libertad.El agua sulfurosa brota de manantiales a lo largo de las orillas del río Farma, en los bosques y la naturaleza, y forman piscinas naturales con propiedades curativas especialmente para las enfermedades respiratorias, motoras y de la piel. En el centro de la Val d'Orcia se encuentra Bagno Vignoni, un encantador pueblo en lo alto de una colina que domina la Val d'Orcia, ya descubierto en época etrusca y romana por sus extraordinarias aguas termales. Aquí, en la práctica, la plaza principal es una enorme piscina termal donde, desde hace más de 2000 años, existe un manantial de agua caliente a 49° C conocido por sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas.

De nuevo en la provincia de Siena, Chianciano Terme es una ciudad termal situada entre Val D'Orcia y Val di Chiana. Sus aguas tienen propiedades beneficiosas ya conocidas entre etruscos y romanos para el tratamiento del hígado y el sistema gastrointestinal.

Una de las ciudades termales más famosas de la Toscana es sin duda Saturnia, situada en la Maremma. Aquí, desde hace más de 3000 años, fluye ininterrumpidamente del subsuelo agua sulfurosa a 37,5°C con excelentes propiedades curativas. En particular, las sales y gases contenidos en el agua actúan sobre los sistemas respiratorio, cardiocirculatorio y esquelético. También actúan como un peeling natural con propiedades detergentes, exfoliantes y antisépticas.

Para unas vacaciones de arte y relax en la Toscana, lo mejor sería combinar la visita a las extraordinarias ciudades de Florencia y Siena con algunas paradas dedicadas exclusivamente a la relajación. Reservando un hotel en Florencia o Siena, luego podrá desplazarse fácilmente por toda la Toscana para descubrir sus aguas termales.