Giovanni dal Ponte (1385-1437) - El protagonista del humanismo tardogótico expuesto en la Galería de la Academia
Hasta el 12 de marzo de 2017, la Galería de la Accademia acoge la primera exposición monográfica dedicada al pintor florentino Giovanni di Marco (1385-1437), más conocido con el sobrenombre de Giovanni dal Ponte, ya que su taller estaba situado en la Piazza Santo Stefano al Ponte de Florencia.
Contribuyeron a su formación los principales artistas de la época afincados en Florencia, nombres famosos como Lorenzo Ghiberti, Lorenzo Monaco, Gherardo Stamina, Masolino, Beato Angelico, Paolo Uccello y Masaccio. Todos ellos artistas del más alto nivel que figuran en la exposición para ilustrar el ambiente artístico en el que se educó Giovanni dal Ponte.
Su producción también se documenta a través de diversos préstamos procedentes del extranjero: de la National Gallery de Londres, el Museo del Prado de Madrid, el Museo de Arte de Filadelfia, el Fogg Art Museum de Cambridge (EE.UU.) y el Museo Jacquemart André de París, por citar sólo algunos. T
as 50 obras expuestas narran y redescubren las maravillas del arte tardogótico en Florencia con el objetivo de promover una clasificación crítica más adecuada de esta interesante personalidad artística de principios del siglo XV, importante protagonista del crucial periodo de transición entre la cultura tardogótica y la renacentista.
Para la ocasión, el gran tríptico con la Coronación de la Virgen y cuatro santos conservado en la Galería de la Accademia, obra de Giovanni da Ponte, ha sido objeto de una reciente renovación que ha devuelto a la obra su esplendor original. Además, con ocasión de la muestra, entra definitivamente en la colección del museo otra obra de Giovanni dal Ponte, la Virgen con el Niño entronizado, recuperada gracias a otra excelente restauración.
La última fase del pintor está documentada por una serie de obras que testimonian la consecución de un lenguaje muy personal, caracterizado por formas grandes y solemnes, que parecen combinar la gran tradición florentina del XIV con nuevas formas y módulos típicos del Renacimiento. Entre estas obras destaca el luminoso tríptico de la Badia di Rosano (Florencia) con la Anunciación y cuatro santos, encargado por la abadesa Catalina de Castiglionchio en 1434, y el magnífico retablo de la iglesia de San Salvatore al Monte de Florencia (posterior a 1434) que representa a la Virgen con el Niño, seis santos y un donante.
La exposición, diseñada por el arquitecto Piero Guicciardini, se caracteriza por la hábil evocación escenográfica de la Florencia de la época de Giovanni dal Ponte y por un especial cuidado en el uso de las luces sobre fondos dorados, creando así efectos muy sugestivos.
