Imprescindibles de la Galería de la Academia

Imprescindibles de la Galería de la Academia

221383307504

La Galería de la Academia de Florencia está tan llena de obras de arte extraordinarias que es alto el riesgo de perderse algo. No puedes llegar desprevenido a la entrada, así que aquí tienes una bonita lista con todo lo que tienes que ver en cada sala... ¡para evitar pasar por delante de una increíble obra de arte sin darte cuenta!

A la Galería de la Academia se accede desde Via Ricasoli, normalmente no sin haber hecho un poco de cola. La longitud de la cola varía sin embargo mucho según la temporada y puede ser realmente larga en temporada alta, de todos modos definitivamente vale la pena esperar un poco para entrar en el templo sagrado del arte renacentista.

Al entrar nos encontramos en la Sala del Coloso, llamada así porque en el siglo XIX había una enorme obra de yeso de uno de los Dioscuros realizada por Montecavallo. Ahora, en su lugar, está el grupo del Rapto de la Sabina en yeso ejecutado por Giambologna, cuya versión realizada con mármol de Carrara se encuentra bajo la Loggia dei Lanzi, en la Piazza della Signoria. En la misma sala podrá admirar el cuadro de Paolo Uccello que representa escenas de la vida monástica y la obra "San Esteban con los santos Jacopo y Pietro" realizada por Ghirlandaio. A continuación, contemple la "Virgen con el Niño, San Juan y dos ángeles" realizada en 1468 por Sandro Botticelli en la que uno de los dos ángeles del fondo mira al visitante implicándole directamente en la escena.

Tras la Sala del Coloso se llega a las Salas Florentinas, una zona realmente fascinante, repleta de admirables pinturas. Entre las obras a destacar está el fresco de Cristo en Piedad de Andrea del Sarto, que estuvo en el monasterio de Santissima Annunziata. A continuación, es imposible no fijarse en la imponente Deposición iniciada por Filippino Lippi y terminada, tras su muerte, por Pietro Perugino. Por último, deténgase en la obra"Venus y Cupido" de Jacopo Pontormo sobre un dibujo de Miguel Ángel Buonarroti.

Desde los Salones Florentinos pase por la Galería de las Prisiones donde se exponen cuatro esculturas de Miguel Ángel llamadas, precisamente, "Prisioneros " que el artista había comenzado para la tumba monumental del Papa Julio II pero que, por diversas circunstancias, nunca llegó a terminar. Junto a los Prisioneros hay una estatua de San Mateo comenzada por Miguel Ángel en 1505 y nunca terminada. No se deje atrapar por el deseo de ver el David y quédese admirando la Piedad de Palestrina, una de las cuatro Piedades esculpidas por Miguel Ángel a lo largo de su vida.

Por fin estás aquí, en presencia de David, la estatua más famosa de Miguel Ángel que representa al joven en el momento previo a lanzar una piedra contra Goliat. Normalmente la estatua está rodeada de decenas de personas, pero con un poco de paciencia, tendrá la posibilidad de verla bien desde todos los ángulos.

La visita termina aquí, con la certeza de no haberse perdido al menos las obras más significativas, aunque por supuesto las que alberga el museo son muchas más.