De la Flor de Lis al David: arte cívico en Florencia en la Galería de la Academia
Hasta el 8 de diciembre, la Galería de la Academia de Florencia acoge la exposición "De la Flor de Lis al David. Arte cívico en Florencia entre la Edad Media y el Renacimiento", que recoge obras de arte que documentan la vida cívica de la Florencia comunal y republicana, desde el siglo XIII hasta el Renacimiento.
Entre ellas se encuentran decoraciones de edificios públicos, dibujos, sellos y documentos con una mezcla de imágenes sagradas, mitológicas y heráldicas. La exposición examina temas artísticos pertenecientes a diferentes aspectos de la historia, la fe y la creatividad de la sociedad florentina en los que sin duda se puede calificar como su "edad de oro".
Entre estos elementos se encuentran la heráldica de la ciudad, la religión, los lugares de poder como el Palazzo dei Priori (actual Palazzo Vecchio) y el Palazzo dei Podestà (actual Museo del Bargello), y los partidos políticos en el poder, por tanto, Anjou, Güelfos y Gibelinos. Esto pone de relieve la importancia que, como en la actualidad, se daba en aquella época a las imágenes como medio de propaganda y comunicación, sobre todo por parte de quienes ostentaban el poder antes del ascenso de los Médicis, acontecimiento que transformó por completo la ciudad de Florencia, tanto desde el punto de vista político como estético.
Numerosas y diferentes referencias alegóricas se encuentran en las obras expuestas. Lo sagrado y lo profano se unen y complementan en un lenguaje figurativo muy complejo. Por ejemplo, en el Palazzo Vecchio -antiguo Palazzo dei Priori- encontramos representaciones diferentes y casi opuestas: desde San Cristóbal y la Rueda de la Fortuna, hasta el Hércules mitológico y el David judío. Este último cierra la exposición con un tema esculpido por Miguel Ángel, que más tarde se convertiría en el emblema de la Florencia republicana.
Por supuesto, el tiempo ha dañado desgraciadamente muchos cuadros y dibujos, pero entre los que se conservan hay sobre todo imágenes religiosas: diferentes representaciones de la Virgen en Majestad, santos patronos e historias emblemáticas del Nuevo Testamento. También hay algunos dibujos raros que representan imágenes infames con detalles truculentos de hechos y personajes enemigos de Florencia, en lugares públicos. Mientras que en el mercado se podían encontrar imágenes auspiciosas, como la estatua de Dovizia de Donatello, símbolo de la abundancia. Por último, en las puertas y murallas de la ciudad se celebraba a la ciudad y a sus aliados con decoraciones e imágenes heráldicas.
Se atribuye un lugar destacado a las Artes, como verdadero motor económico de la ciudad, de modo que para participar en la vida política era necesario estar inscrito en una de las corporaciones.
