David y la anatomía, Miguel Ángel y el estudio de los cadáveres
Al contemplar la estatua del David, conservada en la Galleria dell'Accademia de Florencia, así como todas las demás obras maestras de Miguel Ángel, lo que llama la atención es su extraordinaria habilidad para representar con detalle la anatomía del cuerpo humano. En efecto, Miguel Ángel es universalmente reconocido por su extraordinaria habilidad para moldear el mármol, produciendo estatuas que parecían reales por sus precisos detalles anatómicos. Pero, ¿cómo pudo Miguel Ángel reproducir con tanta exactitud y precisión los detalles anatómicos?
Pues bien, como muchos maestros famosos de su época y de la Antigüedad, Miguel Ángel basó su arte en una imitación perfecta de la naturaleza. Así que a nivel de la forma del cuerpo humano eso significaba el estudio de modelos vivos pero también el estudio y disección de cadáveres, para poder estudiar músculos, tendones y vasos sanguíneos.
Miguel Ángel, sin embargo, no fue ni el primero ni el último en recurrir al estudio de la anatomía sobre cadáveres, incluso Leonardo Da Vinci lo hizo. Pero mientras este último estudiaba los cadáveres en el Hospital de Santa Maria Nuova, Miguel Ángel -23 años más joven- practicaba la anatomía en secreto en la Iglesia del Santo Spirito gracias a su amistad con el prior. Se trataba, de hecho, de un intercambio: Miguel Ángel creó para la iglesia del Santo Spirito un crucifijo de madera que se colocó sobre el altar y el prior de la iglesia puso a su disposición ciertas salas donde podía diseccionar los cadáveres para estudiar anatomía, una práctica que, en aquella época, estaba prohibida por la ley.
Como todos los grandes maestros, Miguel Ángel nunca dejó de aprender y estudiar. Se dice que continuó con las disecciones para el estudio de la anatomía incluso en la vejez, mucho más allá de la creación del David y de otras de sus obras más famosas.